Entré
al baño con seriedad.
Mierda,
especialmente hoy está lleno de chicas.
Salí
de mala gana, y con un poco de miedo, entré en el de los hombres.
Bingo,
no hay absolutamente nadie.
Con
media sonrisa, entré en uno de los retretes y cerré la puerta sin hacer ruido.
Lo
miré fijamente, sin saber muy bien que hacer, indecisa.
Hacía
mucho tiempo que no hacía esto, pero sin más lo empecé a sentir de nuevo, como
una necesidad.
Me
arrodillé y vomité como antes, cuando era novata en la enfermedad.
Terminé,
pero seguí arrodillada, llorando y arrepentida.
Es
como si todo el esfuerzo que he hecho estos meses para recuperarme se hubiesen
esfumado.
Se
puede decir que he recaído, aunque solo haya vomitado una vez. Y todo por culpa
de…
-
¡Mikel tío
espera! – gritó Alex riendo.
Me
quedé helada. No podía ser… ¡¿Por qué ellos?!
-
Eres un tardón
– se quejó Mikel poniéndose delante del espejo.
No
hice movimiento alguno, deseando no ser detectada.
En
silencio, me puse de pie, sin la intención de salir, solo de escuchar un poco.
Ellos
no hablaban, pero se notaba un poco de tensión.
-
Mikel… -
empezó a decir Alex - ¿Qué pasa con Alicia?
Abrí
los ojos y escuché con más atención.
El
rió, como si le estuviese hablando de broma.
-
Que pesado
eres tío…
-
Mikel, le has
hecho una putada de las grandes…
-
Solo me la he
follado, ella pasó un buen rato al igual que yo
-
Esa chica está
enamorada de ti
-
¿Y acaso tengo
la culpa de no sentir lo mismo?
Impotencia.
Eso es lo que sentí al instante.
-
Has jugado con
sus sentimientos
-
Joder, tú le
has hecho lo mismo a muchas chicas ha si que no hables ¿Vale? Además, ya me
tenía un poco harto con sus tonterías de ‘’baja autoestima’’.
Asentí
con sarcasmo sin que nadie me viera.
-
Hice una
apuesta contigo Alex, de que era capaz de hacérmelo con una anoréxica, si ella
era la más adecuada es su culpa
-
No te
reconozco Mikel… pero si a también te gusta
-
Mira, a mi
ella me importa una mierda, ¿entiendes? ¡Una puta mierda!
Con
valentía abrí la puerta con fuerza, haciendo que me miraran al instante.
La
cara de ambos marcaron horror al verme, pero mucho más la de Mikel, que no
sabía que hacer en ese momento.
-
Tranquilos, he
venido a vomitar – informé sin darle importancia – el baño de chicas estaba muy
lleno y este cuando entré estaba vacío.
Me
miraron sin saber que hacer.
-
No me
encontraba muy bien de ánimos y supe que esto me lo levantaría.
Suspiré
y me dirigí a la puerta, pero antes me giré y miré a Mikel con odio.
-
Por cierto
Mikel, por si lo estás pensando… sí, por tu puta culpa he recaído cabrón.
Salí
y cerré de un portazo, con las lágrimas saltadas, y más furiosa que nunca.
Eso
es lo que fui para el: una tía más para follarse que le importa una mierda.
Sonreí,
pero con una sonrisa diferente, una cambiada.
A
la mierda recuperarme, no quiero seguir siendo el títere de nadie.
Vomitaré
todos los días aunque no haya comido, si eso me hace sentirme mejor.
Gracias
a Mikel he recaído en esta enfermedad, y también he dejado de creer en el amor.
Se
puede decir que soy estúpida o gilipollas por vomitar simplemente porque un tío
me ha utilizado.
Pero
es un tío del que me he enamorado, incluso más que de Sergio.
Y así, con tan solo unas palabras, al igual que al
principio de todo, volví a recaer, y no solo en la anorexia, si no en toda la
tristeza, infelicidad, seriedad y pesimismo de antes.----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
Y TERMINÓ! JAJAJAJA me vais a matar, lo sé :$. Tranquilidad, ha tenido un final triste, pero... LA NOVELA TIENE SEGUNDA PARTE e.e
Por favor, decidme que os parecido la novela, y que os parece como acaba (ya me imagino los comentarios u_u) decidme que os parece en mi Ask: http://ask.fm/Alicialaloca
DENTRO DE POCO SUBIRÉ LA SEGUNDA PARTE DE LA NOVELA <3.
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